Happy Christmas

Hoy celebramos Christmas, toda la gente pobre que vive aquí tenían que recibir su regalo: Shari para las mujeres y faldón para los hombres.

Por la mañana después del desayuno hemos ido caminando hasta el Santuario. Al lado hay un colegio y en el patio  se iba a hacer el reparto. Unas 5000 personas estaban esperando: musulmanes. hindúes y cristianos.
 

¿Qué íbamos a hacer?  Había un montón de gente y un tractor lleno de fardos de telas. Los hombres se colocan en una puerta y las mujeres en otra. Se abre la puerta donde están las mujeres, pasa la avalancha y empiezan a hacer filas en paralelo ...Nosotras pensábamos que en esa posición comenzaría el reparto, pero no, la gente se va levantando y con un ticket salen hacia afuera haciendo fila de pie, entregan su tiquet y se llevan su shari.

Nosotras como ni sabemos qué iban a hacer, ni sabemos qué decir, allí estuvimos acogiendo a la gente que se salía de las filas para pedirnos  bendición y si cuela también dinero. Así que hemos rezado sobre sus cabezas, las cabezas de las pobres.

No os podéis imaginar el sentimiento que te va embargando cuando pones las manos sobre sus cabezas, ves su recogimiento, sientes la dureza de su vida y puedes invocar la bendición de Dios.

Rezábamos en alto y les bendecíamos con toda el alma,  que sintieran la fuerza de Dios que les ayudará a superar sus dificultades, que fueran bendición para su familia, que pudieran vivir como mujeres libres e hijas de Dios,... Todo lo que brotaba en la plegaria, al final un gran AMEN y  juntábamos nuestras manos con las suyas para darnos paz.Es un momento emocionante.

Al principio parecía desorden porque rompían las filas, pero, desde lejos, un sacerdote  hizo un gesto  de que muy bien y esa fue la tarea de alguna de nosotras: la más bonita.

Cada una lo vivimos a nuestra manera, yo bendiciendo y fotografiando, que les encanta que les hagas fotos. Carmen  que es más profesional en estos lares  estuvo ayudando en la tarea del reparto. Ilu y Mª Paz bendiciendo. Todas intentando hablar, pero sin poder. En estos casos sólo es posible el lenguaje del corazón. Hacemos cada una lo que podemos.
 

Hemos sentido que nos falta hablar su lengua para haber realizado bien la tarea, pero hemos visto al pueblo pobre, algunas mujeres medio vestidas porque el trapo no daba para más. Y viven así, y cuidan de sus hijos. Hemos visto una mujer amamantando a su niño y parecía su abuela, o sea más joven que nosotras y con poca esperanza de vida.

A la hora de comer hemos compartido unos mazapanes con los curas . Por la tarde  unas hermanas de la comunidad que anoche nos dieron de cenar y nos regalaron un mantón, nos han traído los libros para aprender telegú e inglés. Nos hemos puesto muy contentas. Aunque después al mirarlos mi felicidad se ha venido un poco abajo porque ¡qué difícil!

 Por la noche, después de la cena,  Carmen y yo hemos estado cantando villancicos ante el portal de Belén que han puesto a la entrada y un sacerdote nos ha acompañado y cantado otro en telegú.

A las 10,45 hemos ido  con el Sr. Obispo a la ciudad a celebrar la Misa de Gallo (aquí no dicen eso) que ha comenzado a las 11,15 de la noche. Se hace al aire libre en la parte exterior de la iglesia que es engalanada con colores muy vistosos, tal como a ellos les gusta. Ha durado hasta las 2 porque en ella hacen muchos actos, cantan canciones muy largas y en la homilía se hace una catequesis. En el momento del ofertorio se va acercando toda la gente (éramos muchísimos) y cada uno hace su propia ofrenda y a su vez pide al Sr. Obispo su bendición. Al terminar la ceremonia nos entregan a cada uno de los participants un trocito de bizcocho dentro de una bolsita pequeña. La gente se va feliz.

No sé si os hemos dicho que tenemos frío, pues así es; por lo que vamos con los mantones que ayer nos regalaron las Hermanas en la fiesta.

Al llegar a casa nos hemos comido un mazapán cada una, que era todo lo que nos quedaba después del reparto.

Que el Dios Niño sea para nosotras fuente de amor entrañable que sane nuestras heridas y las heridas de la humanidad y llene de alegría nuestras  relaciones fraternas. Que sean bendecidas en Él todas nuestras familias y todas las personas de buena voluntad.