miércoles, 18 de febrero de 2015

SE INTERRUMPE LA VIDA ORDINARIA

Hoy hace dos meses que llegamos a La India y parece que nuestra vida cotidiana empieza a encontrar su rutina, aunque todavía no se puede decir que lo hayamos logrado del todo. Las actividades normales del día se ven en ocasiones interrumpidas por la visita de personas que se presentan en el lugar y quieren saludarnos. Por cierto, esta mañana nos ha visitado un señor italiano cuyo hijo está llevando a cabo en la diócesis un conjunto de programas muy importantes para la mujer de cara a su promoción. El contribuye económicamente y el hijo prepara y lleva a cabo los programas con una gran implicación y compromiso. Nuestras actividades también suelen ser interrumpidas por las fiestas que con bastante frecuencia se celebran en el entorno. La gente de este lugar es muy celebrativa.
            Una de las actividades que forman parte de lo que es la rutina de nuestra vida diaria es la clase de telugu. Estamos bastante empeñadas en el aprendizaje de esta tan nueva lengua, pero a veces nos lleva un poco de calle. Cuando nos parece que ya sabemos las letras, resulta que no las reconocemos en las palabras y casi tenemos que resolver la lectura de las mismas como si fuera un verdadero jeroglífico. Siendo fiel a la verdad, a mí a en algún momento me desespera un poquito. Espero que con constancia y empeño se ande todo el camino que hay que andar.
            Y precisamente hablando de andar el camino, hoy hemos cambiado de alguna forma la melodía de la vida cotidiana. Ha comenzado la Cuaresma, camino a recorrer hasta la llegada de la Pascua, y con gran solemnidad hemos participado en la celebración del Miércoles de Ceniza en el Seminario, donde un grupo muy nutrido de jóvenes (cerca de 50), que se preparan para el sacerdocio, nos han ayudado con sus cánticos y su oración a interiorizar y orar de forma diferente. Los cristianos del lugar viven con mucha intensidad este momento fuerte del año y hoy en el ambiente olía a fiesta, aunque los estómagos andaban un poco o un bastante vacíos, puesto que el ayuno es algo muy serio en el lugar.
            Quiero comentar algo que me parece muy bonito. En las noticias siempre aparecen los conflictos, en muchas ocasiones provocados por las diferentes religiones y que incluso pueden llegar a guerras y a muertes. Pues bien, en esta zona de La India, cada religión tiene su propio culto, el cual se expresa no silenciosamente sino a todo volumen con bafles de una intensidad asombrosa. Todos viven las expresiones de los demás de forma muy natural. Se  tiene claro cual es el día santo de los hindúes, cual el de los musulmanes, cual el de los cristianos, y nadie se siente molestado porque el otro esté celebrando a horas intempestivas y llene el aire de cánticos y aclamaciones. Ayer los hindúes celebraron su festival (así lo expresan aquí) y hoy nos toca a nosotros. Todos se felicitan, aunque la fiesta no sea la propia sino la de los hermanos de la otra religión. A las 5 de la mañana todos los días tenemos como música de fondo la oración de los musulmanes, cuyas mezquitas no están aquí al lado, pero cuyo resonar parece que las tuviéramos dentro de casa. Creo que es para nosotras una enseñanza, aunque a veces nos moleste ese continuo sonsonete que te impide centrar tu atención en aquello que estás necesitando.
            Ojalá que en esta Cuaresma seamos capaces de quitar aquello que nos separe de nuestros hermanos, privarnos de lo superfluo y compartir con quienes más lo necesitan para mejor encontrarnos con Jesús en la próxima Pascua.

7 comentarios:

  1. Que bonito poder vivir la cuaresma en la india.
    Que bueno que haya tantos seminaristas...
    Un fuerte abrazo hermanas.

    Unidos en la oracion

    Germán

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. De nuevo, gracia, Germán. Te gustaría ver a tanto joven ilusionado y feliz, preparándose para ser sacerdotes.

      Eliminar
  2. Que experiencia tan enriquecedora.....
    Cuanto tenemos que aprender los que estamos a este lado del mundo en la convivencia con las distintas creencias. ...
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es una gran verdad. Nos montamos en nuestro mundo y olvidamos cosas elementales. Desgraciadamente esta experiencia que vivimos aquí no se vive en todo el país. Besos.

      Eliminar
  3. Acabo de leer tu relato y veo que hay mucha gente buena que ayuda a los demás.
    Es enriquecedor conocer aunque sea a través de tu blog otras culturas y otros modos de vida .
    Sigue escribiendo porque de ese modo nos sentimos más cerca de ti.
    Un beso

    ResponderEliminar
  4. Acabo de leer tu relato y veo que hay mucha gente buena que ayuda a los demás.
    Es enriquecedor conocer aunque sea a través de tu blog otras culturas y otros modos de vida .
    Sigue escribiendo porque de ese modo nos sentimos más cerca de ti.
    Un beso

    ResponderEliminar
  5. ¿Ya has vuelto? Aquello es otra cultura muy diferente, ¿verdad? Seguiremos escribiendo.

    ResponderEliminar